Tesoros Sumergidos (Madrid 2008)

[Nhefertari]

Mapas y Cartografía



Ya en 1570 se podía encontrar un mapa de Alejandría en el "Aegyptus Antiqua" de Ortelius. Las hipótesis sobre la ciudad antigua empiezan a aparecer sobre todo a partir de la segunda mitad del siglo XVIII.

En el siglo XJX se sigue tratando de definir esta topografía antigua y, singularmente, la de las partes sumergidas del Portus Magnus. Se desarrollan estudios mas profundos. Los mas notables son, en 1866, los de Mahmud El-Falaky, que servirán de base a muchos otros. La bahía de Abukir también fue objeto de estudio, especialmente para Omar Tussun, a comienzos del siglo XX.

Mapa de la Alejandría Antigua
Neroutsos-Bey "L'ancienne Alexandrie: Etude archeologique et topographique" (Alejandría antigua. Estudio arqueológico y topográfico). París 1888




Mapa de la Alejandría Antigua con sus barrios periféricos
W.H. Mc Lean. "City of Alexandria. Town Planning Scheme" (Ciudad de Alejandría. Plano de la ciudad). El Cairo 1921. Planos y nota descriptiva.

Copys Nhefer

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Los objetos recogidos en el fondo del mar y, sobre todo, los que han pasado tanto tiempo como los que constituyen esta exposición, deben pasar por procesos minuciosos de limpieza y consolidación para que podamos verlos en todo su esplendor. He aquí algunos ejemplos del antes y el después de algunas piezas:

Cantimplora.
Finales del V principios del IV a.C.
Cerámica




Daga
Madera y metal

Primero dos ejemplos de objetos encontrados en estas excavaciones submarinas. En la primera imagen observamos la cantimplora sin que le haya sido retirada la capa de adherencias; en la segunda una daga completamente limpia y tratada.

En la misma daga, apreciamos el diferente estado de conservación de los materiales de que se compone. Mientras la madera del mango se ha podido recuperar bastante bien, la hoja se ve casi completamente corroída.

Cacillos



Cuencos

Bronce

Tanto los cacillos como los cuencos son objetos metálicos con los que se ha procedido de igual manera: Tras limpiarlos minuciosamente empleando buriles, escalpelos de ultrasonidos y micro-tornos, se les cubre de barniz acrílico y cera mineral que los protege del aire y los conserva durante mucho tiempo. La diferencia está a la vista.

Espejo

En algunos caso como es este, se ha utilizado escalpelo manual y lentes de aumento para limpiar las adherencias. También han precisado de procesos químicos para lucir como vemos en la segunda foto.





Todos son de época Ptolemaica y de Heraklion


Todas las fotografías contenidas en este hilo son Copy Nhefer. Está completamente prohibida su reproducción (Lo pongo ya para no tener que repetirlo en cada post)

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Canopo era una ciudad cosmopolita y animada, donde convivían peregrinos y comerciantes procedentes de Egipto, Siria, Grecia, y mas tarde de todo el imperio romano. El canal que unía Alejandría con Canopo estaba sembrado de posadas famosas por su gastronomía, pero también por servir de marco a los placeres mas licenciosos. Canopo era el punto de encuentro de libertinos y coquetas cargadas de joyas.

Los moralistas se revelaron. Siguiendo al poeta satírico latino Juvenal, denunciaron la depravación que se había apoderado de Canopo. Los autores cristianos condenan sus lugares de placer y, a partir del siglo IV, grupos de cristianos atacan a los depravados y a los devotos de cultos "paganos" (curioso cuando menos que pusieran a la misma altura a unos y otros), Con la llegada oficial del cristianismo los placeres de Canopo pasaron a formar parte de la leyenda. Según Paladas, autor de epigramas, la estatua de Eros fue fundida ... para convertirse en sartén ( como vemos la incultura y el fanatismo siempre han hecho estragos)

Contraponiéndose a este aspecto disoluto encontramos numerosas manifestaciones de carácter cultual. Objetos e imágenes religiosos que constituían la otra realidad de la ciudad de Canopo.

Como ejemplo de objetos cultuales veamos esta pieza bella y espectacular:

Siglo II-I a.C.
Mármol

Se trata de lo que se denominó Osiris canopo y, en contra de lo que pudiera parecer, no se trata de una variedad de los vasos canopos que se utilizaban para conservar las vísceras de los difuntos. En este caso se trataba de vasijas cuya cabeza representaba al dios Osiris, dios egipcio muy venerado en toda la región de Canopo. Y lo que contenía era agua del Nilo, o por lo menos agua que simbolizaba todas las bendiciones que el Nilo derramaba sobre el pueblo egipcio.

Detalle de la tapa. Aunque las facciones están bastante desgastadas debido a la acción del agua, las orejas están perfectamente conservadas, y también se pueden apreciar bastante bien las franjas del nemes.



En la parte central del vaso vemos un gran escarabajo alado que sujeta un disco solar, a ambos lados de este disco las cobras reales que lo protegen.



Dos divinidades infantiles se encuentran en los lados del vaso, extienden sus manos hacia un naos, capilla sagrada que solía contener la imagen del dios.




Época romana
Bronce: 6 cm. altura; 2,2 cm anchura; 1,9 cm grosor

Una variación de la pieza anterior, se trata de un pequeño amuleto que tiene la misma forma. Pese a su evidente desgaste su tocado, cabeza y rostro son aún claramente reconocibles.

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También nos han llegado representaciones de los dioses venerados en el Egipto de los Lagidas:

Isis Termutis
Época romana, siglo II d.C.
Mármol

Esta era una forma de representar a Isis popular en época romana. Isis Termutis solía asociarse con Agathosdaimon, dios protector de Alejandría, representado como una serpiente enroscada.

Serapis con calathos
Siglo II a.C.
Mármol

Este dios era una fusión de los dioses Osiris y Apis, fue creado en tiempos de Ptolomeo I quien lo declaró patrono de Alejandría.

Se le representa como un hombre de rizados cabellos y poblada barba.

Calathos

El atributo esencial que distinguía las imágenes de Serapis de la de todos los dioses similares es el calathos o modium. Se trata de la representación de un cesto o medidor de grano, emblema del inframundo. También es el cesto sagrado de los misterios, símbolo de la abundancia que lo pone en relación con la fertilidad de la tierra (de ahí su decoración de plantas) y por lo tanto con alguna de las ancestrales atribuciones de Osiris.

Serapis
Época romana. Siglo II d.C.
Mármol

Esta representación de Serapis es de época mas tardía. En ella se pone de manifiesto el arte romano pese a que se trata de la copia de una estatua de época ptolemaica.

Podemos apreciar un refinamiento con respecto al Serapis anterior, las líneas de esta cabeza son mucho mas estilizadas y podían pertenecer a cualquier otro dios de la mitología romana. Se observa claramente la diferencia de técnica y estilo entre una y otra.

No se ha conservado su calathos pero es seguro que lo llevaba pues podemos ver el agujero en que se encajaba en la parte superior de la cabeza.

La barba y el cabello rizado siguen presentes pero son unos rizos menos "salvajes", por decirlo de alguna manera, que en la representación anterior.

También puede que la diferencia de ambas cabezas se deba a que la anterior está mas en la línea helenística en cuanto al cabello y esta es mas romana.

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Estatua de reina
Siglo III a.C.
Granito negro

Los brazos pegado al cuerpo y el pie izquierdo adelantado dan un porte faraónico a la figura, sin embargo el tratamiento de los ropajes está realizado con la técnica del "paño mojado", totalmente helénica. Digamos que hicieron una fusión con los dos estilos.

Lo que destacaba en las representaciones de las reinas de los Lagidas era el "nudo de Isis"



La parte posterior de la estatua, si bien no está tan elaborada como el resto no se ha dejado inacabada como vemos en muchas otras obras.




Reina vestida de Isis
Época Ptolemaica
Granito negro

Es mas alta de lo normal, y su postura es un poco mas rígida que la de la figura anterior. Lleva un ankh en la mano derecha.

Tanto el "nudo" como los bucles identificaban a las reinas con Isis. Hay que decir que esta costumbre la inició la esposa de Ptolomeo II y se convirtió en una tradición seguida por las reinas posteriores.

Como se puede comprobar, la representaciones de las reinas es muy diferente a las de época faraónica.

Para terminar los tocados, lucen el ureus si bien este es simple y no doble, mas bien parecería una serpiente sin mas y prescinden de otros mas elaborados, por ejemplo el shuty, usado por las Grandes Esposas Reales.

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El arte egipcio no varió demasiado en toda su historia, salvo en el Periodo de Amarna y en el Periodo Tardío en el que se mezclo con tendencias venidas de otros países. Contemplemos pues al faraón visto con los ojos de los artistas de épocas diferentes.

XXV Dinastía
Cuarcita

Ultima dinastía del Tercer Periodo Intermedio, la denominada Kushita. Aunque esta cabeza se encontró en Canopo es evidente que la hicieron llevar allí en época ptolemaica pues su factura nos indica claramente que no pertenece a ese periodo.

XXVI Dinastía
Diorita

Una dinastía mas tarde el arte parece haberse refinado, o quizá sea simplemente el material diferente en que están realizadas estas dos cabezas, aunque lo mas probable es que esta si fuera realizada en la época.

XXX Dinastía
Granito negro

Perteneciente al Periodo Tardío se piensa que esta cabeza representa a Nectanebo, el último faraón egipcio. Tras él el trono de Egipto fue ocupado por los persas.

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Las esfinges fueron representaciones habituales a lo largo de toda la historia de Egipto. Con cuerpo de león y cabeza humana (aunque también existen con cabeza de animales, como el carnero representación del dios Amón) las esfinges solían ser la personificación del poder del faraón ya que el león era el símbolo de fuerza y supremacía, mientras que la cabeza humana simboliza la inteligencia.

Desconocemos como las llamaban los egipcios, pues "esfinge" es el nombre que los griegos daban a un animal mitológico con cuerpo de león, cabeza femenina y alas. Las egipcias al contrario solían tener cabeza masculina, aunque existen algunas con cabeza femenina como las que representan a Hatshepsut, y no eran aladas.

Empecemos por arriba, o sea por ver unos ejemplos de cabezas:

Estas cabezas de esfinges son de estilo egipcio clásico, pero su manera menos rígida permite fecharlas en la época ptolemaica. Son de granito rosa o diorita.

Llevan el tocado emblemático de los faraones y las divinidades, el nemes, utilizado desde el Imperio Antiguo.

Este tocado de tela estaba formado por una banda frontal que descansaba en las orejas, dos bandas laterales caían sobre el torso, y la parte posterior sobre una trenza anudada en la espalda. En el centro esta representado el uraeus, la cobra que tradicionalmente protege al faraón de sus enemigos.

Esta bella cabeza que se conserva en un estado admirable, podría pertenecer a uno de los primeros ptolomeos. Mantiene la banda lateral derecha del nemes y parte del hombro sobre el que esta cae. La diferencia de conservación con respecto a las cabezas anteriores es notoria, posiblemente se deba al material en que está tallada, la diorita, una piedra dura y difícil de trabajar de ahí que la finura de los rasgos que vemos tenga mas valor.

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Las esfinges variaron poco a lo largo de la historia de Egipto, si bien fueron adaptándose a las tendencias artísticas del momento nunca perdieron su esencia primigenia: simbolizar el poder, la fuerza y la vida después de la muerte.

Veamos un par de esfinges separadas por un gran lapso de tiempo.

Esta es la esfinge mas antigua que se mostraba en esta exposición, posiblemente fue llevada a Canopo en época ptolemaica desde otra parte de Egipto.

XIX Dinastía (Ramses II)
Cuarcita

En la parte derecha podemos ver los cuartos traseros de la representación del león, con su cola sobre el lomo. También son visibles, en la parte delantera, las inscripciones jeroglíficas y las dos bandas laterales del nemes.

La parte izquierda se encuentra en mucho peor estado y apenas se puede adivinar forma alguna del cuerpo del animal.

En el pecho apreciamos el cartucho del faraón, a ambos lados los laterales del nemes.

Finales Época Ptolemaica-Época Romana
Granito negro

En esta pequeña esfinge de época mucho mas tardía que la anterior, podemos ver como los rasgos del cuerpo están muy marcados. También es mucho mas estilizada.

En ambos lados vemos como se han querido representar las costillas del león, además se pueden apreciar bastante bien las garras traseras. En el lado izquierdo, como en el caso anterior, la cola sobre el lomo.


Terminamos con otras cuatro esfinges, también son de épocas diferentes aunque la diferencia de tiempo no es tan grande como en las dos que hemos visto anteriormente.

Esfinge 1

Podemos ver las costillas y en la parte derecha, como siempre, la cola. Además en el centro están las dos bandas laterales del nemes, la de la derecha se conserva en su mayor parte mientras que de la izquierda solo queda la parte final.

Esfinge 2
Esta y la anterior siglo V a.C.
Diorita

Está tan deteriorada que apenas se conserva algo mas que la garra trasera derecha, un poco de las costillas y parte de la cola.

]
Siglo II a-C
Granito rosa

De estas dos esfinges llama la atención que, mientras la de la derecha es realista y está bastante trabajada, la de la izquierda es apenas un esbozo, puede que se deba a que esta última esté inacabada aunque mi percepción personal, es el desgaste del agua .

Los  detalles detalles y las garras delanteras de la de la derecha, están en muy buen estado de conservación, y en la parte delantera vemos las bandas del nemes.

Curiosamente de estas cuatro esfinges, las ultimas tienen aspecto de ser mas antiguas aunque no es así, quizá se debe a los diferentes materiales en que se realizaron, unos mas resistentes al agua que otros

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Y ahora pasemos a ver las tres esfinges completas (bueno, bastante completas), que se muestran en esta exposición. Van en orden cronológico:

Siglo 4 a.C.
Granito negro

Aquí tenemos una representación del último faraón de la XXX Dinastía, la última de faraones egipcios, Najthorhabet mas conocido por su nombre helenizado, Nectanebo II. Bastante bien conservada aunque le faltan las patas. No tiene las costillas excesivamente marcadas, en realidad no tiene ningún rasgo que sobresalga. Su rostro carece de expresión, pese a sus gordezuelos labios y sus muy bien dibujados ojos.

Siglo I a.C.
Diorita

Esfinge que aúna el estilo faraónico con el helenístico. El cuerpo está poco trabajado, no así la cabeza que presenta el nemes con ureus típicamente faraónico, y el rostro, que vemos sereno y un punto inexpresivo, si bien no alcanza la inexpresividad de la imagen anterior. La mezcla de estilos de esta esfinge surge a partir de Ptolomeo VI, y se hizo habitual en las representaciones de los monarcas alejandrinos. La forma del tocado es muy característico de las monedas de Ptolmeo XII.

Siglo I a.C.
Granito gris

Esfinge de la misma época que la anterior y que podría de tratarse de Ptolomeo XII, padre de la famosa Cleopatra. Su estilo es igual al de la esfinge anterior si bien los rasgos aquí si parecen trasmitirnos algo. No vemos una cara inexpresiva sino que parece como si estuviera iniciando una sonrisa, evidentemente se trata de unos rasgos típicamente helenísticos pero parece como si el artista hubiera querido que el rostro trasmitiera una calidez de la que carecen las dos anteriores.

Estas dos últimas esfinges se encontraron cerca la una de la otra. Podrían haber estado situadas en un pequeño templo dedicado a Isis, y puede que acompañaran a la imagen de un sacerdote que porta un Osiris-canopo.

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Periodo romano
Mármol

Esta estatua de la diosa Isis, en bastante mal estado por cierto, fue encontrada por Omar Tussum y se exhibía en el Museo Marítimo de Alejandría. Aunque en un principio no se encontró el niño, sobre la pierna izquierda de la diosa se encontraron restos de él.

Aquí podemos ver la pierna del niño. Quedan algunos restos mas de la parte baja del tronco, como parte de la nalga izquierda, pero están tan desgastados que distinguirlos es muy difícil.

La pierna sin embargo es perfectamente reconocible como vemos en este primer plano.

Un dibujo de como encajaría en la estatua anterior la parte del niño dios, Harpócrates, que veremos a continuación. Aunque la verdad es que muy esclarecedor no es, porque la parte del niño parece cualquier cosa.




He aquí la parte de la estatua correspondiente al hijo de Isis, Harpócrates, que época ptolemaica sustituyó a Horus en la mitología. Fue encontrada en las excavaciones submarinas de Frank Godio y mediante análisis y fotografías se confirmó que era el hijo que faltaba en la estatua de Isis.

Parte delantera. Correspondería al rostro del pequeño Harpócrates, completamente desgastados como vemos.



Parte posterior. Se ve perfectamente la mano de la diosa sosteniendo a su hijo.

Aunque resulta difícil, dado el estado de las dos partes que constituyen esta estatua, quizá sean estas dos imágenes las que hagan mas fácil el ubicar el niño en el cuerpo de su madre siguiendo lo que hemos visto en el dibujo. Creo que sobre todo la primera es la mas fácil de encajar.

En fin, después de reunir a madre e hijo la estatua de, lo que parecía ser solo Isis, se convirtió en una Isis lactans, forma de representación de esta diosa de la que podemos ver muchas piezas en la presente exposición. Como por ejemplo, la siguiente estatuilla:

Isis lactans
Época Ptolemaica
Bronce

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