LA CARNE DE LOS DIOSES
Muchas piezas se realizaron en plata, electro (una aleación de oro y plata), cobre y bronce, casi siempre complementadas con piedras preciosas o semipreciosas como cuarzo, turquesa, lapislázuli, cornalina, gemas, alabastro y amatista, y con vidrio coloreado. Pero en su gran mayoría se fabricaron de oro puro. Este era el metal más apreciado por los egipcios, que le atribuían connotaciones divinas; una inscripción decía: "
El oro es la carne de los dioses [...]. Recuerda cuáles fueron las palabras de Re cuando comenzó a hablar: 'Mi piel es oro puro'".
Brazalete de Ahhotep
XVIII Dinastía. Reinado de Ahmose
Oro y lapislázuli
Dra Abu el Naga
El oro se extraía fundamentalmente de los desiertos de Nubia –nb o "
país del oro"–, mientras que la plata se importaba del Próximo Oriente y, a partir del siglo VII a.C., de la península ibérica a través de los fenicios. El cobre se extraía de las minas del Sinaí, y el estaño, que se mezclaba con el cobre para producir bronce, se conseguía del Próximo Oriente, de las islas Casitérides (islas Británicas) o de la península ibérica. En los muros de las mastabas se han hallado representaciones que nos muestran la entrega de metales a los faraones como fruto de la explotación de minas, el comercio, los tributos y el botín de las campañas militares.
La importación de metales preciosos permitió el desarrollo de importantes talleres de joyería en las ciudades egipcias, particularmente en Menfis, Coptos, Tebas y Alejandría. Estos talleres estaban impulsados por el Estado, que introdujo una larga lista de cargos y especialistas relacionados con el trabajo del metal: jefes de talleres, jefes de artesanos, jefes de orfebres, cinceladores, grabadores y sopladores, entre otros. Aunque nunca firmaron sus obras, los orfebres disfrutaron de un gran prestigio.
Gracias a los relieves de algunas tumbas podemos ver cómo se desarrollaba su trabajo y el tipo de herramientas que utilizaban: desde buriles, cinceles y martillos hasta pipas de soplar, fuelles, hornos y moldes. Los joyeros desarrollaron técnicas de orfebrería cada vez más sofisticadas, desde el calado y el cincelado hasta el repujado y, sobre todo, el grabado.
Tumba de Benia (TT 343)
Valle de los Nobles
Abd el-Qurna
Copys Nhefer